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Habla Lucely Chalá, esposa de Renato Ibarra, tras caso de violencia

Desde las agresiones sufridas la noche del pasado jueves 5 de marzo, Lucely Chalá, esposa de Renato Ibarra, había permanecido en silencio (...)

Desde las agresiones sufridas la noche del pasado jueves 5 de marzo, Lucely Chalá, esposa de Renato Ibarra, había permanecido en silencio sobre lo sucedido… hasta ahora.

La joven de 25 año habló sobre el ataque que sufrió por parte del aún futbolista del América y algunos de sus familiares y amigos. “Renato y yo estábamos en la habitación y él me jaloneó del cabello y me empujó contra la pared. Mientras él me pegaba, sus familiares, en lugar de calmarlo, ¡comenzaron a pegarle a mi hermana y luego a mí! Lo bueno es que en la casa estaba un amigo en común, Víctor, quien nos metió a un vestidor, contó en entrevista con TV Notas.

Al preguntarle sobre cómo ha sido su relación en general, Lucely confesó que Renato es una persona voluble, pero que nunca había sido violento.

“Renato siempre ha sido voluble; con él los momentos buenos eran muy buenos, pero los malos eran muy malos. En ese entonces había discusiones, gritos, era violento con sus palabras, lastimaba mucho, me insultaba, sus enojos eran muy fuertes, pero nunca me pegó”.

Sin embargo, parece que en su primer caso de violencia física, Renato podría haber salido de sí. Incluso su hijo pequeño no pudo frenarlo.

“Atacaron a mi hermana; la tenían en el piso, la golpearon. A mí me tenían contra una pared mientras a ella le pegaban. También estaba mi hijo presente viendo todo, y de eso Renato estaba consciente, mi niño gritaba: ‘No le peguen a mamá, déjenla’, tenía una espada y les quería pegar para defenderme”, agregó Lucely.

La esposa de Renato cerró la entrevista con el comentario de que no compartía su historia por morbo o por la atención mediática, sino para generar conciencia sobre que cualquier mujer puede ser víctima de violencia, aunque no te haya sucedido nunca antes.

“Yo no doy esta entrevista por fama o morbo, sino porque oyes de la violencia contra las mujeres y no piensas que eso que les está pasando a miles, te puede pasar a ti. No porque el hombre sea figura pública o él nos mantenga económicamente, tenemos que quedarnos calladas. Gracias a Dios estoy aquí, fui de las pocas que tienen la suerte de quedar vivas y ahorita no estoy en la lista de mujeres muertas por violencia”, concluyó.