La pelota sí se manchó. Día negro en Querétaro, violencia cobra vidas
Se veía venir, la poca seriedad que la Liga MX le ha puesto a la violencia en el futbol mexicano ya se cobró nuevas víctimas. Esta vez en Querétaro, hinchas de Atlas habrían perdido la vida.
Los hechos ocurridos en el Estadio Corregidora vuelven a poner en la mesa el tema de la violencia en las tribunas de los estadios en México, las escenas son escalofriantes, hinchas de Atlas en su mayoría mujeres y niños corriendo en el campo mientras los varones se lían a golpes en la tribuna contra los de Gallos Blancos.
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Los protocolos de seguridad parecían inexistentes en un partido que terminó en escándalo bochornoso con personas corriendo por el terreno de juego, golpes, violencia y una invasión sin precedentes con brutal violencia dentro y fuera del estadio.
Las imágenes en televisión no daban crédito a lo ocurrido, fueron minutos de escándalo en vivo sin que apareciera un solo policía a intentar reestablecer el orden en la cancha de Querétaro.
En redes sociales de inmediato se comenzaron a compartir imágenes de lo ocurrido, escenas brutales donde queda claro que no había suficiente policía para brindar seguridad a los asistentes, tanto a los locales como a los visitantes que llegaron en gran cantidad de la ciudad de Guadalajara pero fueron superados en número por la hinchada local.
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Reportes desde Querétaro hablan de más de una decena de muertos y varios más heridos, hasta 17 fallecidos se menciona en redes sociales y bien podría ser cierto pues en los videos en redes sociales se observan varios hinchas severamente golpeados.
Hay que voltear a los casos de éxito en México donde la violencia se ha erradicado por los buenos protocolos de seguridad y la logística implementada por la policía. Como Ciudad Universitaria, un recinto muy caliente que durante muchos años fue foco rojo de violencia y que con una adecuada división de las porras se ha logrado extinguir prácticamente.
La directiva de Querétaro es responsable de todo lo acontecido, la sangre derramada en la Corregidora cae sobre sus manos, su falta de responsabilidad al no atender con seriedad un partido de alto riesgo y dar tantas facilidades a su barra para emboscar a la parcialidad de Atlas.
La pelota se manchó. Las autoridades iniciarán las investigaciones pertinentes, habrá detenidos pero esperemos que no se quede en el olvido, que se aplique la ley y no quede impune esta masacre en el futbol.