La Superliga europea pone a temblar en serio a FIFA
La revolución en el futbol comenzó y 12 equipos de los más grandes de Europa ya oficializaron la creación de la Superliga teniendo a Florentino Pérez del Real Madrid como su primer presidente.
El anuncio del torneo se dio de manera conjunta entre los clubes fundadores, 12 equipos poderosos a nivel de clubes que han decidido declararle al guerra a UEFA y crear su propio torneo, se trata de: AC Milan, Arsenal, Atlético Madrid, Chelsea, FC Barcelona, Inter Milán, Juventus, Liverpool, Manchester City, Manchester United, Real Madrid y Tottenham.
A este grupo de 12 se pretende que se integren otros tres equipos fundadores más y que otros cinco equipos reciban la invitación a participar en este exclusivo torneo que comenzará en agosto del 2021 y terminará en mayo del 2022.
FIFA se pone a temblar
Las amenazas de FIFA no fueron suficientes y los 12 mencionados clubes decidieron desafiar toda norma en busca de un torneo que genere mejores ingresos para los involucrados en toda la pirámide del futbol.
Sin embargo FIFA fue clara en las sanciones, los clubes que decidan participar en la Superliga serán expulsados de todo torneo de clubes organizado por UEFA o FIFA, además que sus jugadores serán suspendidos para jugar con sus selecciones nacionales en Copas del Mundo y campeonatos regionales.
Mundial sin Messi, Cristiano Ronaldo, Salah o Sergio Ramos
De seguir adelante la amenaza impuesta por FIFA, cualquier futbolista que dispute un solo minuto en este torneo se perderá automáticamente la opción de participar en la Copa del Mundo de Qatar 2022.
FIFA utiliza el recurso de represión para someter a sus equipos más importantes a nivel de clubes, pero con honestidad, un mundial sin las figuras internacionales del futbol no será del agrado de la audiencia y quien saldría perdiendo es la propia FIFA con bajas audiencias que a la larga podría cambiar completamente las competencias internacionales como hoy las conocemos.
No sabemos el alcance que vaya a tener la decisión de estos 12 equipos de ir contra los intereses de UEFA, pero sí estamos seguros que una Champions League sin ninguno de estos equipos no tendrá el mismo prestigio ni las mismas ganancias que hoy genera el torneo.
Vaya jugada de contragolpe se aventó la Superliga, una muestra del poder que tienen los grandes equipos europeos que están cansados de seguir las reglas poco justas de UEFA, sobre todo en la repartición de ingresos económicos producto de las ganancias de los torneos que organiza.
