Miguel Herrera se va triste y endeudado... no avergonzado
Miguel Herrera acapara las portadas de los medios informativos por su salida de las Águilas del América, pero fueron las acciones ‘extracancha’ del estratega las que originaron su destitución.
“Las actitudes dentro de la cancha, no corresponden a la grandeza de la institución” dice el comunicado donde América oficializó la destitución de Herrera.
El propio Piojo Herrera utilizó sus redes sociales para despedirse de la que fue su casa por los últimos tres años, se mostró muy agradeció con la institución pero recalcó que se va “triste y endeudado” pues a su juicio pudo haber conseguido más trofeos con América.
El Piojo debería irse avergonzado
Otra vez el temperamento de Miguel Herrera le juega en contra y le impedirá cumplir su sueño de dirigir en Europa, ojalá, por el bien del entrenador, atienda su problema en terapia pues la necesita si quiere seguir escalando peldaños en su carrera.
Su salida del Tri tras un bochornoso incidente donde Miguel agredió a Christian Martinoli culpándolo de “hablar mal de la selección” -nos tendrías que pegar a todos Miguel-, y luego el vergonzoso pleito en Concacaf con el asistente de Bob Bradley.
Supuestamente Miguel Herrera no aceptó error alguno en su comportamiento del pasado sábado en Orlando, algo que molestó muchísimo a Emilio Azcárraga pues es de humanos cometer errores pero es de hombres sabios reconocerlos y aparentemente a Miguel le ganó su ego.
En Europa no aceptan jueguitos de palabrerías, ofensas a los árbitros, rivales, mentadas de madre a la afición rival y hasta golpes contra el cuerpo técnico del otro equipo.
Ojalá por el bien del estupendo entrenador que es Miguel Herrera recapacite pronto y en su próxima oportunidad en un banquillo, por que la tendrá, deje atrás este tipo de conductas que solo lastiman su prestigio, ese que se ha ganado con resultados en la cancha, no con actitudes inapropiadas fuera de ella.
Foto portada vía @miguelherreradt
