Rúben Amorim admite la presión del trabajo en el Man United tras derrota ante Wolves
Después de perder tres partidos consecutivos, incluyendo una derrota 2-0 ante Wolverhampton Wanderers el día de Boxing Day, la presión sobre Amorim se intensifica, aunque lleva poco tiempo en el cargo tras sustituir a Erik ten Hag en noviembre, Amorim asegura que no se siente seguro en Old Trafford. "El entrenador del Manchester United nunca puede estar cómodo", afirmó. "Sabemos que si no ganamos, cualquier entrenador está en peligro, y así es el trabajo".
La dificultad para Amorim ha sido implementar su sistema 3-4-3 sin haber podido trabajar con sus jugadores desde la pretemporada. Inicialmente, él prefirió hacerse cargo del equipo el próximo verano, pero aceptó el reto en noviembre. "No tiene sentido hablar de eso ahora. Estoy aquí y debo enfocarme en el trabajo", señaló. También destacó lo complicado de esta fase, mencionando la falta de confianza entre los jugadores y la necesidad de tener tiempo para mejorar el equipo.
El calendario no favorece a Amorim, ya que el Manchester United enfrentará una serie de partidos exigentes después de las derrotas ante Tottenham, Bournemouth y Wolves. Newcastle, que ha ganado sus últimos cuatro juegos anotando 14 goles, visitará Old Trafford y luego el United jugará contra el líder de la liga, Liverpool, el 5 de enero, seguido por un encuentro de la FA Cup contra Arsenal. Amorim espera una noche "nerviosa" contra el equipo de Eddie Howe y reconoce que sus jugadores deben enfrentar la presión del estadio.
A pesar del difícil momento, Amorim se mantiene enfocado en revertir la situación. "Tenemos que luchar contra todo, porque nuestros seguidores siempre están ahí, aunque estén cansados de esta situación", comentó Amorim. Considera que cada jugada de Newcastle cerca de su área creará tensión en el estadio, pero confía en que sus jugadores podrán manejarlo. "Queremos ser competitivos y tratar de ganar el partido, eso es todo", concluyó.