El destino de los Azulejos está en manos de Vladimir Guerrero Jr. y de nadie más.
Existe una sensación de urgencia este invierno, quizás tardía, pero crucial en la discusión sobre las "ventanas de competitividad" del equipo. A pesar de sus grandes inversiones, Toronto enfrenta la posibilidad de que estas ventanas se cierren si no actúan pronto.
Jugadores clave de los Azulejos como Vladimir Guerrero Jr. y Bo Bichette verán sus contratos expirar pronto, lo que genera presión sobre la directiva. Las decepciones pasadas eran más fáciles de asimilar cuando había tiempo y contratos por delante, pero ahora se acerca un período decisivo sin victorias recientes en postemporada como respaldo. La inversión financiera está ahí, pero no se ha traducido en éxitos significativos en el campo.
La figura central de estas discusiones es Vladimir Guerrero Jr., considerado una estrella del equipo y cuyo contrato futuro podría compararse con algunos de los más grandes de la MLB. Un acuerdo con Guerrero no solo aseguraría su permanencia en el equipo más allá del 2026, sino que también enviaría un mensaje sobre las intenciones a largo plazo de la franquicia. Sin un jugador como Guerrero, Toronto podría enfrentar un período de reestructuración, lo que no sería bien visto por los aficionados ni por los propietarios.
El interés en Juan Soto también añade complejidad a la situación. La competencia por su fichaje será feroz y costosa, lo que resalta el encarecimiento de los contratos estrella en la MLB. Guerrero, con solo 26 años, mira hacia una agencia libre potencialmente millonaria, aumentando la presión sobre los Azulejos para tomar decisiones estratégicas. Todo parece indicar que, una vez más, el futuro del equipo podría depender en gran medida de lo que decidan hacer con Guerrero.