Debemos ganarnos nuestra llegada: ¿Qué sigue en la carrera por el título de OKC?
Aún trabajando en forjar su propia historia, el equipo intentó ganar la Copa de la NBA en Las Vegas, pero no lo logró, enfrentándose a la eficiencia del Milwaukee Bucks que se llevó la victoria con un margen de 16 puntos. Esta derrota simboliza la lucha constante del Thunder por ganar respeto, sometiéndose al proceso de altibajos necesarios para establecerse como contendientes serios.
A pesar de disfrutar de una temporada anterior destacable con 57 victorias que les otorgaron el primer puesto en la histórica Conferencia Oeste, y de tener actualmente el mejor récord del Oeste esta temporada con una defensa estelar, el Thunder sigue a menudo subestimado. Parte de esto puede deberse a su naturaleza discreta y a su mercado pequeño, lo cual se ve reflejado tanto en las estadísticas como en aspectos del calendario, como no haber sido seleccionados para jugar en el especial de Navidad.
Los Thunder, liderados por el entrenador Mark Daigneault y conocidos por su estilo de juego basado en integridad y hechos, suelen enfrentar desafíos en cuanto a las faltas recibidas durante los partidos. Aun siendo agresivamente defensivos y liderar la liga en robos y bloqueos, su presencia en la línea de tiros libres no corresponde con sus estadísticas de ataque, lo que crea cierta frustración. Sin embargo, el equipo intenta mantener su enfoque en el respeto mutuo y las estadísticas al tratar estos temas con los árbitros.
Sam Presti, presidente del Thunder, junto con Daigneault, está comprometido a construir un equipo que no solo tenga éxito en la cancha, sino que también refleje humildad y trabajo en equipo, rechazando la atención innecesaria. Esta filosofía se encapsula en el lema que Presti comparte: "No hay bandejas de plata en Oklahoma", destacando que el Thunder debe ganarse su propio camino al éxito.