Tener público en las gradas de los Dolphins es un desesperado grito por algo de normalidad
Estados Unidos no deja de liderar el mundo como el país con mayor número de contagios y muertes por coronavirus. Sin embargo, negocios e instituciones deportivas no dejan de insistir en abrir sus espacios para permitir una senzación de normalidad poco realista.
Mientras que analistas se encuentran aún inseguros sobre si la NFL podrá llevar a cabo su temporada regular en tiempos y en forma, los Miami Dolphins han compartido su plan para recibir público en las gradas.
Siguiendo medidas de salud estrictas, los Dolphins anunciaron que recibirán 13 mil fans en el Hard Rock Stadium, durante su primer juego de la temporada en casa el próximo 20 de septiembre cuando reciban a los Buffalo Bills.
Florida es uno de los estados más afectados por COVID-19, y se mantiene catalogado como uno de los focos rojos del país. Aún así, los Dolphins han insistido en seguir adelante con su plan de puertas abiertas y la NFL se los ha permitido.
Traducción: “Al llegar los fans tendrán entradas escalonadas, con su horario marcado en el boleto de trada. Los boletos tendrán entradas touchless.”
Una irresponsabilidad
Por mucho que ansiemos volver a una especie de normalidad que incluya poder estar ahí para apoyar a nuestros equipos favoritos, el riesgo que implica recibir público en las gradas es demasiado grande y resulta una irresponsabilidad. Al tener a los equipos viajando de una ciudad a otra, poco servirán las medidas estrictas de unos equipos si otros no las comparten.
Como ejemplo tenemos la MLB. Aunque la liga de beisbol está jugando sin público, los viajes y constante movimientos de los equipos de un lado a otro han resultado en contagios masivos de jugadores y aplazamientos en fechas de juego, como ha sucedido con los Marlins, o los Yankees.
Y esto solo enfocándonos en los atletas y el staff de los equipos. También hace falta sumar el riesgo de contagio que representa para los 13 mil fans que se presenten al Hard Rock Stadium a ver el juego.
Las medidas
Los Dolphins parten de un estricto protocolo con el que buscarán recibir afición al mismo tiempo en que cumplen con medidas preventivas, las cuales incluyen:
- Separación de 6 pies de distancia entre aficionados.
- Uso de cubrebocas obligatorio.
- Se prohiben reuniones de grupos fuera del estadio.
- Los aficionados tendrán un horario designado para ingresar al estadio.
- El estadio será limpiado y sanitizado antes y después del juego.
- El estadio abrirá más accesos de ingreso y egreso para evitar conglomeraciones.
- Habrá un registro de los asistentes para poder seguir algún brote de coronavirus en dado caso.
El manual completo con todas las medidas se extiende en más de 45 páginas.
Estamos muy dudosos sobre esta estrategia y tendremos que esperar a que se realice la primera prueba y sus resultados antes de crees que esto pudo ser una buena o mala (vamos por la mala) idea.
