Javier Tebas acusa a los clubes de la violencia en el fútbol argentino
Piedras voladoras, lunas rotas, gas pimienta, vómitos, cargas policiales, ambulancias y hasta una niña embalada con bengalas. De ahí que se haya aplazado el encuentro de vuelta entre River Plate y Boca Juniors. Hace días que la final de la Copa Libertadores se alejó de las canchas. El caos que vive Argentina se ha trasladado al fútbol. Y se busca el culpable. Unos apuestan por los hinchas, otros, por el gobierno argentino. O incluso, por los propios clubes.
Ahora ha sido Javier Tebas, el presidente de LaLiga, quien ha decidido dar su opinión sobre los responsables. "La culpa es de los clubes, no de la Policía", destacó este lunes en Valencia antes de acudir a la conferencia titulada "Fútbol, TV y negocio. LaLiga como player global en la industria del ocio y el entretenimiento". No fueron las únicas palabras del presidente de LaLiga puesto que se explayó en los disturbios que vive el fútbol argentino. Y no es la primera vez que se pronuncia sobre la sombra de la violencia en el fútbol del país que luce un sol en su bandera.
Javier Tebas argumentó por qué la violencia es culpa de los clubes y no de la Policía: "Es la consecuencia de una situación que vive el fútbol desde hace muchos años que no se está atajando. No es un problema de que haya quince o dieciséis que apedrean un autobús, sino un problema que hay siempre ahí, un rescoldo de violencia que en cualquier momento salta".
Conocimiento de la actualidad futbolística del país argentino
El presidente de LaLiga no solo se refirió a la violencia que ha anidado con fuego el partido entre River Plate y Boca Juniors. También recordó los incidentes que obligaron a jugar el clásico Rosario-Newells. "Yo sigo mucho el fútbol argentino porque es un país que quiero muchísimo y vive una situación muy complicada. En una ciudad como Buenos Aires, en la que creo que hay unos nueve o diez equipos en Primera, no se pueden desplazar los visitantes a ver los partidos. Es algo que aquí tuvimos en su momento, todo empieza desde los insultos en los estadios, la colaboración que puede haber con las barras bravas allí, es algo que hay que cortar radicalmente", concluyó.